"La vida es una aventura, arriésgate"

lunes, 11 de marzo de 2013

¿Somatizando?



Siempre he pensado que nuestro cuerpo y nuestra mente son muy "sabios" y que llegado el momento en el cual tensas la cuerda más de lo que puedes, o paras o "te paran".

Hace un par de semanas, sin más, prácticamente el mismo día me dió ciática (jamás en mi vida había tenido) y unas anginas de caballo...puro estrés creo yo.

Como las anginas eran bacterianas y con antibiótico en pocas horas podía volver a la carga, mi mente, mi cuerpo o ambos decidieron regalarme una ciática para que descansara un poco sí o sí.

Hay que decir que una lleva bastante mal lo de estarse quieta y trabajé con el portátil desde la cama y con la esterilla.

Aunque estoy mucho mejor de aquel episodio, un nuevo terremoto profesional va a poner a prueba mi resistencia de nuevo, de hecho, estoy tan desbordada que no sé ni por donde empezar.

Me da mucha pereza empezar de nuevo otro proyecto cuando me he desgastado tanto física y mentalmente en el que ahora dejo y que me apasiona, justo cuando después de tanto esfuerzo empezaba a tener los resultados por los que tanto he luchado.

Este sector es así y con la que está cayendo, me puedo sentir afortunada por tener un trabajo con unas condiciones más que aceptables.

Intentaré positivizar y canalizar todo ese estrés con la relajación, porque no me apetece seguir somatizando más!!!

domingo, 17 de febrero de 2013

Técnicas de relajación

Hace mucho ya que no escribía, si bien es cierto que por motivos desconocidos, mi PC se negaba a dejarme escribir en el blog, en este o en cualquiera, me daba cierta pereza.
Me he propuesto seguir con él, por diversos motivos, aunque el principal es porque considero que se trata de una buena forma de descargar mi mente de "tensiones" diarias.

Hace unas semanas empecé a realizar unas sesiones individuales de técnicas de relajación, la chica con las que la realizo es un encanto y el solo hecho de oírla hablar, me transmite mucha paz.

Unos meses atrás, echaron de la empresa al subdirector de mi área, un encanto de hombre, un profesional de los pies a la cabeza y una persona que siempre estaba ahí para escucharte. Lógicamente, si tenía que echar una bronca lo hacía, pero siempre sin perder las formas y con toda la razón del mundo. Nunca entenderé que sucedió en realidad, bueno ni yo ni nadie, a excepción del que lo echó, claro.

A partir de ese momento hemos vivido una vorágine en mi departamento, no sólo nos afectó anímicamente su salida, sino que desde la entrada del nuevo subdirector todo ha sido una locura.
Tanto estrés me ha generado unas fantásticas contracturas en la espalda y un sueño no demasiado reparador.

Soy de las que opina que cuando algo no funciona, en lugar de quejarte (bueno un poquito también me quejo), o bien lo intentas cambiar o te vas con la música a otra parte.

Así que después de unas frustradas clases de Yoga, decidí probar con las técnicas de relajación.

La verdad es que me funciona bastante bien, aunque requieren bastante constancia y no siempre la tengo. Por la noche estoy cansadísima y cuando intento dejar la "mente en blanco", parece misión imposible, la capacidad de concentración se diluye.

Eso sí, seguiré perseverando, creo que es una buena herramienta para intentar conseguir mantener un equilibrio en cuerpo y mente.